La Molina

La Molina es sinónimo de nieve, de historia y de diversión para todos los públicos. Pionera en los deportes de invierno, fue la primera estación del estado español en instalar un remonte mecánico en el año 1943. Setenta años después La Molina se ha convertido en una estación moderna e innovadora que dispone de una gran oferta deportiva y lúdica para satisfacer los gustos de todos sus visitantes.

Sede de grandes eventos, una amplia trayectoria en la alta competición internacional avala la calidad de las pistas y las instalaciones de La Molina. Los esquiadores y snowboarders podrán disfrutar de 61 kilómetros esquiables divididos en 53 pistas para todos los niveles, de un snowpark de iniciación y otro de grandes dimensiones con el halfpipe más grande de todo el Pirineo.

Para el público no esquiador, la estación ofrece también un gran número de actividades en la nieve, además de una amplia oferta gastronómica y hotelera tanto en la propia estación como en la comarca de la Cerdanya, donde está situada La Molina y de la cual es punto emblemático.